Un par de placas de puerta antiguas, muy ornamentales y teatrales, de estilo Recoco francés, decoradas con curvas en movimiento, adornos y una bestia mítica (¿león?).
Originalmente pensados como muebles de puerta funcionales, los elementos altamente decorativos y la hermosa pátina desgastada por el tiempo de este par trascienden lo cotidiano: un objeto de arte por derecho propio. Una adición espectacular a cualquier puerta interior, pared de galería o gabinete de coleccionista.
Alrededor de principios del siglo XIX. Dimensiones: 210 mm x 160 mm.
